Por: Gloria Álvarez
Muchos expertos afirman que practicar una técnica de relajación en los estudiantes desde temprana edad antes de iniciar una rutina diaria de estudio ayuda a desarrollar la inteligencia emocional y trae beneficios a corto y largo plazo. Estos beneficios son: aumentar la confianza en uno mismo, es decir, que el niño empiece a darle sentido a su propio ser, a detectar sus virtudes y defectos, a vencer sus miedos y timidez, aprender a valorarse respetarse y amarse así mismo. También estas técnicas ayudan a mejorar la memoria y la concentración fortaleciendo así el proceso de aprendizaje y la adquisición de nuevos conocimientos.
Tener técnicas de relajación le ayudan a los estudiantes a mejorar los niveles de estrés, estos son capaces de autorregularse con mayor facilidad, y de manejar la ansiedad ante diversas situaciones que vive diariamente en sus entornos familiares y sociales.
Entre las técnicas de relajación recomendables para iniciar está la música, esta juega un papel importante al momento de pretender relajar y motivar. Una música suave con sonidos propios de la naturaleza son los ideales. Se recomienda siempre mantener este tipo de música de fondo cuando los estudiantes están inquietos o alterados, esto ayudará a recuperar la calma poco a poco.
Dar un masaje suave, dar abrazos, mimos ayuda a fortalecer el vínculo entre él y su maestra, decir frases motivadoras, exaltar sus valores y virtudes permite que los estudiantes se sientan seguro e importantes.
El “mind fulness” es una técnica muy asertiva y recomendada que aporta varios beneficios como el autocontrol, la concentración, ampliar la memoria, pensar y medir consecuencias, mejorar y estar en paz con su interior.
Esta técnica no solo se recomienda hacerla en el colegio si no también en familia para fortalecer vínculos de seguridad y confianza.
Si tomamos estas técnicas como un hábito bajaremos los niveles de estrés además aportaremos de forma significativa en el desarrollo cognitivo y social en los niñas, niñas y adolescentes.